VINOS DE VALTIENDAS: PARA LOS QUE VALORAN LO DIFERENTE
Valtiendas es un lugar donde el vino marca el calendario. Situada en la provincia de Segovia, en los páramos del Duratón, los vinos de esta denominación tienen una personalidad propia que les diferencia. La altitud de los viñedos cultivados en los suelos pedregosos del páramo, unida a unas condiciones climáticas extremas, da lugar a vinos de sabor intenso, con una acidez natural equilibrada y un bouquet muy particular. Un producto con mucha personalidad. Aquí la calidad no se regala.
Los vinos de Valtiendas representan la integración social y la sostenibilidad de una región que lucha por mantenerse viva y activa. No solo elaboran vinos excepcionales, también promueven el desarrollo sostenible de nuestros pueblos y dan a conocer de cerca una cultura vitivinícola auténtica y única, fomentando el cuidado del medio ambiente y apostando por prácticas agrícolas respetuosas con la naturaleza y las personas.
La zona de producción de uva para la elaboración de los vinos protegidos por la mención «Vino de Calidad de Valtiendas» está constituida por los terrenos que el Órgano de Gestión, con base en criterios exclusivamente técnicos, considere aptos para la producción de uvas con la calidad necesaria para ser destinados a la elaboración de tales vinos y ubicados en los siguientes términos municipales, junto con sus pedanías y barrios, pertenecientes a la provincia de Segovia.
Hay pueblos, que viven casi olvidados, pero que son perfecto para descubrir el corazón de la provincia. Fuentidueña, Sacramenia, Valtiendas y San Miguel son los focos más atractivos. A estos hay que unir otros nombres como Aldeasoña, Carrascal, Laguna de Contreras o Fuentesoto.
La base de este producto es la uva. La Comarca de vinos de Valtiendas, en el noroeste de la provincia de Segovia, limita con la Denominación de Origen Ribera del Duero, en las inmediaciones de uno de los espacios naturales más bellos de la región: las Hoces del Duratón.
El Castillo de Fuentidueña se resiste a desaparecer. Un pueblo donde el turista encuentra magníficos ejemplos del arte románico. Es el caso de la Iglesia de San Miguel con una magnífica galería porticada apoyada sobre capiteles vegetales y una maravillosa colección de canecillos historiados. La Iglesia de San Martín, también románica, se une a la Ermita del Santo Cristo del Humilladero y al antiguo hospital.
Los atractivos para una ruta son muchos. La comarca es una fusión no sólo de paisajes, sino también de culturas. La ciudad de Cuéllar, en plena Tierra de Pinares, aporta a la ruta la manifestación artística del mudéjar. Se la conoce, de hecho, como la capital del mudéjar que corrobora no sólo con su conjunto monumental sino también con su Centro de Interpretación. Las Iglesias de Santiago, la de San Esteban y la Trinidad son algunos de los templos de la villa fieles a este estilo. El Castillo es el buque insignia de la villa. En perfecto estado de conservación actualmente alberga el instituto de Cuéllar. Una visita teatralizada permite recorrer sus salas, donde aparecerán las bodegas subterráneas en las entrañas de la fortaleza. El Centro de Interpretación de los Encierros y el Medieval completan la oferta museística de esta ciudad que cuenta con más de diez iglesias, cuatro conventos y un sinfín de casas nobles y palaciegas.
En las inmediaciones de Hontalbilla están las Lagunas de Cantalejo y la de Lastras de Cuéllar, dentro de la zona de pinares. En este pueblo merece la pena acercarse hasta la Iglesia parroquial de estilo románico y ampliada en el XVII.
En los alrededores de Sacramenia se encuentra, en el Coto de San Bernardo, el descomunal Monasterio de Santa María la Real, de porte catedralicio. Fundado en el siglo XII por Alfonso VII, se levanta en torno a tres naves y lo remata la cabecera de cinco ábsides. Siguiendo la austeridad de los cánones cistercienses, la fachada occidental contiene un bello rosetón y una puerta de arquivoltas de medio punto. En 1925 sus propietarios vendieron al magnate de la prensa norteamericana y coleccionista de obras de arte, William Randolph Hearst, el claustro, la sala capitular y el refectorio. Piedra a piedra, fue llevado a Estados Unidos en 11.000 cajas de madera. En 1953 la revista Time lo llamó ‘el rompecabezas más grande de la historia’. Hoy se encuentra ‘montado’ en Miami (Florida).
Valtiendas presume orgullosa de contar con un bello conjunto de bodegas subterráneas que circundan el pueblo poblado de viñas. De su patrimonio destaca la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, de época renacentista.
Las bodegas integradas en la DOP son pocas, pero sus vinos muy interesantes. Bodegas Centaura en Fuentidueña pueden ser un buen inicio antes de pasar a Finca Cárdaba en Valtiendas, donde también se ubican Ribera del Duratón y Vagal. Muy interesante es el trabajo de Alejando en Navaltallar, en Navalilla, que tiene como vecinos a Pago el Almendro. Vamenia y Zarraguilla son buenos representantes para Sacramenia.