Muchos lo celebran todos los días, pero la Semana Mundial del Chocolate (del 14 al 23 de octubre) es una excusa más para disfrutar de uno de los pecados más placenteros, las Seashells de Guylian. Un chocolate belga con más de 50 años de historia que nació gracias a la historia de amor entre el maestro chocolatero Guy Foubert y su mujer Liliane. Los bombones con forma de conchas del mar son el resultado de la confluencia del chocolate negro, blanco y con leche, al igual que confluyeron las vidas de los dos enamorados.

Es muy fácil enamorarse de los productos de Guylian, no solo por su variedad y altísima calidad, sino por el propósito y la implicación sostenible que hay detrás. Las condiciones de los cultivos de cacao en África Occidental son muy precarias y los beneficios muy limitados, por eso las nuevas generaciones no los continúan. Guylian es desde 2022 miembro de la familia Fairtrade, produciendo así cacao de comercio justo, lo que garantiza un precio justo y fijo a sus productores, garantizándoles una red de seguridad.

Un chocolate con el 100% de sus ingredientes de origen natural cuyo envase es totalmente reciclable y que además lucha contra la deforestación. En 2018 Guylian sustituyó el aceite de palma (una de las mayores amenazas para la biodiversidad) por la manteca de karité y el aceite de girasol. En el mismo año también firmó la Carta Beyond Chocolate, una asociación del chocolate belga sostenible que le comprometía a cumplir el objetivo de fabricar sus productos únicamente con cacao sostenible para 2025. Gracias a la asociación con el Comercio Justo, el objetivo se ha cumplido tres años antes.

Esta Semana Mundial del Chocolate la celebramos con sus emblemáticas Original Praliné Seashells (conchas marmoleadas en chocolate blanco, con leche y negro de 3 colores) y para lo más intensos, con el Dark Praliné Seashells (rellenas de praliné negro, elaboradas con avellanas tostadas y recubiertas de chocolate belga negro al 72%). Bocados dulces y exquisitos además de respetuosos con las materias primas y las condiciones de las personas involucradas.

Todos los productos de Guylian se elaboran en Sint-Niklaas (Bélgica) y se venden en más de 120 países de Europa, Asia, Australia y América, convirtiéndola en una de las 10 marcas de chocolate envasado más vendidas. Sus maestros chocolateros llegan a producir hasta 75 toneladas diarias, lo que se traduce en una facturación global de 80 millones de euros.