4 QUESOS PARA UNA MESA
Algunos lo llaman turismo lácteo, aunque los más atrevidos apuestas por el “cheese trip”. Buscar pequeñas queserías nos suele llevar a lugares mágicos, porque de cada quesero suele haber una pequeña historia de reto personal.
Por lo general es un producto que se ama o se odia. El apasionado del queso acaba convirtiéndose en un estudioso. Busca tipos de leche, métodos de conservación y algún que otro sistema de elaboración que sea novedoso. Los tópicos, las mentiras y las falsas leyendas también tienen su parte en este negocio. Por suerte, cada vez hay más productores que han hecho de su quesería un pequeño mundo donde la calidad tiene su justo valor.
Quesos La Calaveruela
En las dehesas de Fuente Obejuna, cerca de donde nacen el Guadiato y Zújar, pastan a sus anchas las 725 ovejas de Juan Naranjo. Coto, el pastor de la finca, controla que el particular ejército no se disperse por los pastos de Monte Olivete, como se conocen estas tierras desde hace tres generaciones. Juan y Amparo, su mujer, ingenieros agrónomos, retomaron el negocio ganadero familiar y, bajo el nombre del cerro que vigila la aldea, elaboran desde hace más de tres décadas uno de los quesos artesanales más reconocidos de la zona.
Aquí, decir “artesanal” es decir con las propias manos, con el sacrificio que exige el capricho del tiempo y el compromiso con la tradición y el paisaje. Aquí el buen año depende de una primavera húmeda y de un clima equilibrado que colabore en la calidad de los forrajes que alimentan a sus ovejas. Si llueve mucho o si el sol pega con ganas, la producción se resiente y los quesos que llegan al Mercado de Abastos de Fuente Obejuna y al de Vallehermoso de Madrid, se reducen.
El cerro Calaveruela está catalogado como Bien de Interés Cultural por el poblado y los enterramientos del Neolítico que se encuentran en sus laderas. Fuente Obejuna, aparte de ser protagonista de la obra de Lope de Vega publicada en 1619 cuenta además con un interesante patrimonio monumental, como la iglesia parroquial Nuestra Señora del Castillo, la Casa Cardona, el Convento de los Padres Franciscanos, o la ermita de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
c/Aurora, 1
14298 La Coronada. Fuente Obejuna · Córdoba
Tel :639705205
Quesos Almonte
Hace seis años Tiburcio José Ramiro salió en la prensa local recibiendo una buena noticia: el queso La Monterreña acababa de ser reconocido con el Premio Extrema Selección al Mejor Queso de Cabra con Denominación de Origen Protegida Queso Ibores. El que continúa siendo gerente de la Quesería Almonte mantiene la misma ilusión que hace 30 años cuando empezó a elaborar esos quesos de cabra cubiertos por un manto de suave pimentón de la Vera. Su pasión por la sierra cacereña y por la tradición de una comarca donde las cabras son las auténticas protagonistas.
La Deleitosa, municipio en el que se elaboran estos quesos, forma parte del Parque Nacional de Monfragüe, destino en sí mismo, igual que toda la zona alrededor del río Ibor, un paisaje agreste y de montaña. Las cabras que pastan entre roquedales y los prados de la solana producen una materia prima muy especial. El tomillo, el romero y la jara ponen la parte perfumada.
Qué hacer en la Deleitosa
Las comarcas de Trujillo, Villercas, La Jara y la propia de Los Ibores ofrecen itinerarios más que atractivos para una escapada en plena naturaleza. El Parque de Monfragüe, al pie de la Deleitosa, es perfecto para no perderse los miradores de aves rapaces, como el Salto del Gitano. Desde las ruinas del castillo de Monfragüe las vistas son estupendas, igual que desde el meandro del río Tajo llamado el Salto del Corzo.
c/ Eras s/n
10370 Deleitosa (Cáceres)
Tel: 927 540 277
Quesos Campoveja
Cuentan que fue el tío Luis el que convenció a Félix Sanz de que debía ser él el que elaborara los quesos para darle unidad al producto que el joven Félix se encargaba de recoger entre los distintos pastores de la zona para que su tío lo comercializara en Barcelona. Corría el año 1952 y entonces Félix cambió los quesos elaborados por la leche de las ovejas y el suyo adquirió un único carácter.
Hoy en día, Jesús y su equipo mantienen vivo y con éxito el negocio del queso castellano, artesano y puro de oveja, al que han añadido el valor de las experiencias a través de catas y visitas a la quesería.
También organizan rutas gastronómicas de queso y vino, con visitas a las bodegas Matarromera (D.O. Rueda) y al restaurante La Botica de Matapozuelos, con una flamante estrella Michelín. A los quesos curados, viejos y añejos de Campoveja, madurados según la tradición, se unen los de autor, “nuevos y distinguidos”, como el Ahumado Viejo, que en 2012 recibió el Premio al Mejor Queso Ahumado del Mundo, o el CCL, un queso de pasta y corteza lavadas en el que destacan los aromas y sabores intensos. Los quesos en aceite también hacen gala de la innovación de que presumen en Campoveja.
Qué hacer en Serrada (Valladolid)
El Castillo de la Mota, el Palacio de los Dueñas y la capilla de San Juan de la Cruz son sólo una muestra de lo que hay por ver en la vecina Medina del Campo. Los alrededores son tierras de vinos y buena gastronomía. Bodegas y restaurantes hacen difícil la elección.
Herederos de Félix Sanz S.L.
Ctra. Matapozuelos, 62
47231 Serrada – Valladolid
Tel.:983559405
http://www.quesoscampoveja.com/
Quesos Rey Silo
Desde Pravia llega uno de los quesos de leche cruda de vaca que han recuperado la tradición perdida de la zona. Pascual Cabaño y Ernesto Madera, periodista y biólogo, eligieron la leche de las fantásticas vacas asturianas para elaborar sin prisas uno de los mejores quesos del país, a orillas del río Nalón. Llegaron aquí casi que por coincidencia y decidieron darle vida a un Afuega’l Pitu nuevo, pero como los de antes. Lo primero que impusieron fue la confianza en la receta original y, con la garantía de las instalaciones a la altura, apostaron por el trabajo con la leche cruda. Hoy pueden decir que un Rey Silo parece salido de la mesa del propio rey que, por allá en el siglo VIII, instauró la corte en el pueblo donde se cura calma.
Qué hacer en Pravia:
La antigua capital cristiana de Asturias, porque así lo quiso el propio rey Silo, cuenta con todo lo que se le puede pedir a una villa del norte. Verde, bonita arquitectura y buena comida.
Plaza Salcedo, 2
33120 Pravia, Asturias
Tel.: 639 59 32 09